El quebrantahuesos llamado Oscar

Había una vez un quebrantahuesos llamado Oscar, que había nacido en el centro de cautividad de Sierra de Cazorla. Como ya era adulto los criadores lo soltaron, fue a buscar una cueva y recordó que un hermano suyo con dos días más que él, llamado Jaén tenía una cueva cerca. Oscar entró en la cueva de su hermano y le saludó.

-¿Ya te han dejado libre?-dijo Jaén

- Pues si, oye no he encontrado ninguna cueva ¿Me dejarías quedarme a vivir?- Respondió Oscar.

Jaén asintió con la cabeza.

A la mañana siguiente Oscar se levantó con hambre, fue a ver a su hermano y lo encontró con unos huesos y le dijo:

 

-Yo esto no puedo tragármelo.

Su hermano le contestó:

- Pues claro que no, nosotros los quebrantahuesos nos lo comemos así.

Y Jaén le explicó como se hacían.

Oscar le felicito: -¡Qué puntería! Ahora probaré yo.

Jaén se rió:

-¡Ja, Ja, Ja! No has acertado ni una sola.

 

Cuando alcanzaron toda la madurez ambos prepararon las maletas y se despidieron, Jaén le comentó que se iría a las montañas de Cataluña porque había encontrado una novia. Sin embargo Oscar buscaría pareja en las montañas de Jaén. Así que se despidieron.

 

De repente cuando Oscar cruzaba Cazorla oyó tiros, con unos reflejos espectaculares esquivó los tiros, cuando andaba un poco más tranquilo le entró hambre. Luego fue a comer una carroña que vio, cuando descendía casi se choca contra una red de tendidos eléctricos. Y cuando lo evito vio a un quebrantahuesos muerto. Después de 5 horas de viaje llegó a su destino y encontró una pareja, con ella tuvo 3 quebrantahuesos.

 

(Para los que no lo sepan los quebrantahuesos se alimentan tirando los huesos a las piedras para que se partan.)