Los reinos cristianos

Principales Hechos

A principios de la historia los cristianos ocupaban una pequeña parte de la Península. Con el paso de los años los cristianos fueron avanzando poco a poco. Al finar de la época habían formado dos grandes Coronas: la Corona de Castilla y la Corona de Aragón. En 711 algunos visigodos se refugiaron en lo alto de las montañas del norte. Allí eliguieron a Pelayo, que, en el año 722 venció a los musulmanes en la batalla de Covadonga, haciendo así que no se conquistara el norte de la Península. Había muchos reinos entre ellos estaban: el reino asturleonés, el primer reino, el reino de León y el reino de Castilla. También opusieron resistencia otros reinos como los condados catalanes y el reino de Navarra. A partir de XI, el reino de Portugal se independizó del reino de León, también los condados catalanes se unieron creando la corona de Aragón, más tarde los reinos de León y de Castilla se unieron formando la Corona de Castilla.

La sociedad

La sociedad se dividía en tres grupos: los caballeros o nobles se dedicaban a defender la población, poseían muchas tierras y riquezas, y cobraban impuestos a los campesinos. El clero se dedicaba a la oración y a la cultura. Estaba constituida por los monjes y por los curas y obispos, que atendía iglesias. El clero cobraba el diezmo a los campesinos. Y los campesinos que eran la mayoría de la población y trabajaban en los campos de los nobles.

La herencia

Los reinos cristianos nos dejaron iglesias y monasterios de estilo románico. También nos dejaron palacios y catedrales de estilo gótico, que se caracterizaban por sus elevada altura su decoración era a base de cosas puntiagudas y sus amplias ventanas decoradas con vidrieras.